Históricamente las mascotas han tenido un rol importante en las actividades del hombre proporcionando compañía, motivación y agrado, porque estas son embajadores de un amor sano y una lealtad incondicional y así, de a poco, pasan de ser los protagonistas del hogar a ocupar un lugar destacado en escuelas, trabajos, consultorios y hospitales; lugares donde se los lleva para brindar acompañamiento –en varios casos, con perros instruidos por profesionales.
“Sabemos que el vínculo entre el humano y un animal tiene un impacto directo en las necesidades físicas y psíquicas de niños y adultos, nada se compara con la alegría de volver a casa y encontrar un compañero leal, amor incondicional que puede brindar más que compañía. Por ello creemos necesario que quienes padecen de una enfermedad terminal, puedan acceder al cariño de su mascota”, señaló el Senador.
Asimismo agregó “las mascotas también pueden disminuir el estrés, mejorar la salud del corazón e incluso, ayudar a los niños con sus habilidades emocionales y sociales, porque son embajadores de un amor sano y una lealtad incondicional y así, de a poco, pasan de ser los protagonistas del hogar a ocupar un lugar destacado en escuelas, trabajos, consultorios y hospitales, por eso creemos que quienes están internados en los hospitales no pueden alejarse de sus seres queridos, como son los animales”.
“Lo anterior esta comprobado por múltiples publicaciones científicas que evidencian los beneficios para los pacientes que reciben Terapia Asistida por Animales (TAA), práctica que es desarrollada desde hace muchos años en diferentes instituciones de salud a nivel mundial, lo que justifica aún más nuestro proyecto de acompañamiento”, puntualizó Bianchi.
Finalmente sentenció “buscaremos que los reglamentos internos de los establecimientos hospitalarios permitan a quien posea una enfermedad grave y/o terminal, acceder a la compañía de su padre, madre o quien este a su cuidado, hijos, cónyuge o conviviente civil, persona significativa y mascota o animal de compañía, con la única excepción que de ello derive un peligro para el propio paciente”.